El sava llevó a cabo durante el pasado año en la ciudad un total de 3.568 actuaciones de carácter general
El Servicio de Atención a las Víctimas en Andalucía tiene por objetivo ofrecer una respuesta especializada e integral a las necesidades específicas de las víctimas de delitos en todos los ámbitos
El secretario general para la Justicia, Eugenio Pizarro, y el director general de Justicia Juvenil y Cooperación, Francisco Muñoz, han visitado este miércoles el Punto de encuentro Familiar de Cádiz y la oficina del Servicio de Atención a las Víctimas en Andalucía (SAVA), ubicada en el Palacio de Justicia. Durante el recorrido por las instalaciones han recordado que el SAVA llevó a cabo durante el pasado año en la ciudad de Cádiz un total de 3.568 actuaciones de carácter general, asesoramiento jurídico, atención psicológica y asistencia social. Además, han añadido que de esas prestaciones se beneficiaron en 924 personas (un 7,7% más que en el año anterior), que accedieron a un recurso completamente gratuito ubicado en las sedes judiciales, donde se ofrece un servicio público que facilita apoyo jurídico, social y psicológico a las víctimas de delitos que lo requieran.
Como ha explicado el director general de Justicia Juvenil, el objetivo fundamental de este servicio de la Consejería de Justicia e Interior es ofrecer una respuesta especializada e integral a las necesidades específicas de las víctimas de delitos en todos los ámbitos, mediante una intervención de carácter interdisciplinar. Para ello, cada oficina del SAVA cuenta en la ciudad de Cádiz con un equipo técnico especializado de tres personas integrado por psicólogos, juristas y trabajadores sociales.
Muñoz ha recordado también que en la provincia de Cádiz existe otra oficina del SAVA en Algeciras, con un equipo formado por otras tres personas, que llevaron a cabo durante el pasado año 2.191 actuaciones de las que se beneficiaron 691 personas.
El director general ha agradecido hoy a los profesionales del SAVA su labor y ha puesto de relieve “la importancia que tiene para las víctimas esta atención integral en todos los ámbitos”. Así, ha detallado que una vez que una víctima acude al servicio sus responsables la atienden en cada uno de los procedimientos judiciales en los que se puede ver inmersa. En primer lugar, en el proceso judicial propiamente dicho. Pero también le informan sobre sus derechos, sobre la posibilidad de acceder a la justicia gratuita, al tiempo que en las entrevistas se detectan las posibilidades necesidades psicológicas y sociales (ayudas económicas, habitacionales, etc).
“Las víctimas no están acostumbradas a lidiar con estas situaciones, por eso es frecuente que la intervención de estos profesionales sea acompañarlas en todos los momentos del proceso. Son personas que hablan su mismo lenguaje, que les traducen el significado de los procedimientos judiciales y que les ayudan a poder obtener los recursos a su disposición”, ha añadido Muñoz.
Del mismo modo, ha subrayado que el 30% de los usuarios tratados en el SAVA de Cádiz lo han sido por delitos de violencia de género, por lo que en estos casos también se les ofrece información sobre la posibilidad de gestionar órdenes de protección y sobre todos los recursos disponibles para este tipo de víctimas.
PERFIL
Durante 2017 el 72% de las víctimas que han solicitado la atención del SAVA en el último año en Cádiz son mujeres y, en cuanto a la tipología de los delitos sufridos, la mayoría son torturas y otros delitos contra la integridad moral (24,5%), contra la libertad sexual (18%), contra la libertad (14,6) y contra las personas (12,9).
El perfil medio de la persona usuaria del Servicio de Asistencia a Víctimas refleja que se trata mayoritariamente de una mujer, de entre 30 y 44 años, soltera, con estudios primarios y que ha sufrido un delito de torturas y otros delitos contra la integridad moral. Por contra, el perfil medio del victimario refleja que es un hombre, de 30 a 44 años, ya que el 88% de los presuntos autores del delito que motiva la asistencia al SAVA son de género masculino.
En las dependencias del SAVA se atendieron el año pasado, además, a un total de 74 menores de edad, 36 niñas y 38 niños, como víctimas también de delitos.