Los últimos adelantos en ortopedia infantil en el puerta del mar corrigen las deformidades ocasionadas por espina bífida

Gabriel tiene 10 años. Nació con espina bífida y desde su nacimiento está siendo tratado en el hospital Puerta del Mar de Cádiz por distintos problemas asociados a la enfermedad. Le han operado hasta en cuatro ocasiones. La última de ellas para favorecer el alargamiento de la parte inferior de su pierna derecha, y a la vez facilitar la corrección del pie, ya que, como muchos afectados por espina bífida, nacía con una pierna casi cuatro centímetros más corta y un pie equino, que le obligaba a andar de puntillas con sus muletas.
Gabriel se ha podido beneficiar de los últimos adelantos para corregir su deformidad. Tras la última intervención, hace dos meses, los traumatólogos ortopedistas especializados en niños le han colocado un dispositivo denominado 'fijador externo circular', que está consiguiendo un alargamiento de 3 centímetros en su miembro inferior derecho.
El pequeño se encarga de reajustar este aparato en casa tal y como le ha enseñado su médico y con la supervisión de Aníbal, su padre. Este proceso se controla además a través de un software informático que asegura la correcta corrección de la pierna y el pie del pequeño. Una corrección que se hace sin que Gabriel tenga herida abierta ni incisión.
Gabriel es el primer paciente en la provincia de Cádiz al que se ha aplicado esta tecnología, que sólo se está utilizando en algunos centros hospitalarios a nivel andaluz. Para su tratamiento ha sido fundamental además la aplicación de la impresión 3 D para la recreación de segmentos del esqueleto humano. Gracias a este sistema, los cirujanos ortopedistas pudieron ensayar su última intervención para su mayor seguridad y efectividad.
Desde el Puerta del Mar han destacado la importancia de contar con un servicio de traumatología y ortopedia con técnicas especialmente diseñadas para niños, que no son adultos de menor tamaño, según insisten los especialistas.
El equipo médico que cuida a este niño isleño, fuerte y valiente, calcula que solo tendrá que llevar el aparato durante tres meses, de los que ya han pasado dos. Después iniciará un proceso de rehabilitación que le permitirá aumentar su mejora.