El vandalismo urbano azota a cádiz con daños en el barrio de astilleros, la plaza de las tortugas y celestino mutis
Los actos contra el mobiliario urbano de la ciudad a menudo quedan impunes, pero no ha sido el caso de los quelonios del afamado monumento de Canalejas, donde la colaboración de un taxista resultó clave para identificar al autor de los daños causados en la fuente
El pasado sábado una de las tortugas de la fuente del monumento en el paseo de Canalejas de Cádiz quedó sin cabeza y otra fracturada. El autor recibió una denuncia por daños en el patrimonio municipal, pero los demás actos vandálicos han quedado sin castigo al no ser posible identificar a los autores.
Los vecinos se muestran enfadados con esta situación, ya que en algunas ocasiones pueden generar riesgos a los ciudadanos. Es el caso del barrio de Astilleros, donde han sido retiradas algunas barandillas del Paseo Marítimo, siendo peligroso, sobre todo, para los más pequeños.
También el muro del recién estrenado cerramiento del colegio Celestino Mutis ha sufrido algunas pintadas. Los vecinos piden mayor seguridad para evitar este tipo de actos que dañan la imagen de la ciudad.
Una ciudad turística como Cádiz se ve especialmente afectada con los destrozos del mobiliario de la ciudad y, más aún, con los del patrimonio histórico.
