Las reliquias de santa bernardette llegan a cádiz para su veneración

Cuando era una niña, Bernardette Soubirous jugaba junto a una gruta a orillas del río Gave de Pau, a las afueras de la población francesa de Lourdes.
Hasta el 18 ocasiones aquella niña estuvo junto a la Virgen María. Y sus palabras tuvieron tanta fuerza entre los católicos que nadie la negó.
En 1862 el papa Pío IX autorizó su veneración. Y en 1933, el papa Pío XI proclamó santa a aquella niña que se hizo amiga de la Virgen.
Hoy, la gruta en la que se le apareció a Santa Bernardette recibe 8 millones de visitas al año.
Por eso sus reliquias viajan por el mundo. 
Y han llegado hasta Cádiz.
La Diócesis de Cádiz y Ceuta ha recibido su relicario en la iglesia de Santo Tomás para la veneración de todos los creyentes. 
Porque a ella se le atribuyen muchos milagros. Hasta 69 curaciones se le atribuyen.
Por algo estuvo tan cerca de la Madre de Dios.
Su vida fue muy intensa, y en esta visita de sus reliquias se ha dado a conocer aún más cómo fue Bernardette y cómo vivió.
Y, sobre todo, acercar sus reliquias a quienes sufren, de ahí que la parroquia de Santo Tomás haya celebrado una pequeña peregrinación al Hospital Universitario Puerta del Mar.
Además, por la noche se ha celebrado un rosario de antorchas también presidido por el relicario con su costilla.
Las reliquias viajan éste viernes hasta Algeciras y, tras su veneración, viajarán hasta Córdoba, donde también se ha organizado una peregrinación por las parroquias de la Diócesis.