Héroes de andar por casa
La solidaridad se ha convertido en una de las pocas vías de búsqueda de soluciones en este estado de cuarentena por el coronavirus. Ante la falta de mascarillas, una familia de Cádiz se ha ofrecido a confeccionar mascarillas de tela mientras llegan las quirúrgicas a centros de mayores como Fragela y comedores sociales
La familia Mayone Palmero ha decidido emplear su cuarentena por el estado de alarma en sofocar la fuerte demanda de productos de higiene para los colectivos más vulnerables. Su casa se ha convertido en un taller de costura de mascarillas de tela. Lo que comenzó como una medida de higiene para la familia, se ha convertido en una forma de ayuda para trabajadores de comedores como la congregación de Las Esclavas o los usuarios de la Residencia Fragela, a la que esta semana han entregado más de una treintena. El director del centro de mayores reconoce que la ayuda de esta familia y de otros comerciantes ha sido clave para sofocar la falta de recursos.
Esta costurera solidaria reconoce que estas mascarillas artesanales no son sustitutas de las quirúrgicas, pero sirven como medida de prevención.
Esta familia solidaria subraya que continuará con su labor y que para ello hacen un llamamiento a la colaboración ciudadana para la obtención de materiales. Todos aquellos interesados pueden contactar con esta familia por redes sociales.
