El gobierno prorroga la prohibición del atraque de cruceros hasta que se tengan mayores garantías frente al coronavirus
Esta medida, que se viene aplicando desde el inicio del estado de alarma, ha supuesto ya la cancelación de más de 100 escalas y pérdidas millonarias para el puerto y la economía general de Cádiz
La vuelta de las escalas de grandes cruceros a puerto todavía tendrá que esperar más. El Ministerio de Transportes, movilidad y agenda urbana ha decidido ampliar la prohibición de atraques de buques turísticos en tanto no existan mayores garantías sanitarias.
Así lo recogía el BOE que, atendiendo a indicaciones del Ministerio de Sanidad, apunta que esta disposición se mantendrá hasta la finalización de la situación sanitaria ocasionada por el coronavirus.
De esta forma, el puerto de Cádiz, como los del resto de España, continuarán sumando jornadas sin la llegada de estos buques de pasaje. Una cuenta que ya supera los 100 días en este trimestre considerado para los muelles gaditanos como la 1ª temporada alta de cruceros del año.
Precisamente las previsiones que se tenían para este período y en este 2020, que se auguraba como muy bueno, apuntaban la escala de más de 100 grandes cruceros. Sin embargo, desde aquel lejano 14 de marzo en el que se estableció la prohibición de las escalas de cruceros los muelles de Cádiz tan solo ha visto recalar excepcionalente tres buques de pasajeros:
El Sovereing que llegó el mismo fin de semana que comenzaban las medidas por el estado de alarma, y al que se permitió bajar excepcionalmente a su pasaje para poner rumbo en autobús a Lisboa; el Carnival Breeze, que llegó para recoger a parte de los trabajadores que iban a transformar su hermano Carnival Victory en el astillero de Puerto Real; y el Allure of the Seas este mismo martes en parada técnica tras concluir sus obras de mantenimiento en el astillero de Cádiz.
Triste balance éste provocado por la crisis del coronavirus que tiene un alto coste hasta ahora sin calcular. Y es que los más de 100 atraques previstos para este trimestre perdido habrían sumado en conjunto la posible llegada de más de 186.000 cruceristas. Escalas que, según algunas estimaciones, podrían haber reportado algo más de 1,5 millones de euros al puerto y más de 7 millones de euros a la economía general, considerando el gasto medio de unos 40 euros que se establece por cada uno de estos turistas.
