Incertidumbre, pérdidas económicas y reinvención marcan el año de pandemia para hosteleros y comerciantes
Los empresarios piden a las administraciones ayudas directas para mantener sus negocios hasta el verano.
La incertidumbre, la adaptación de los locales a las medidas sanitarias, los recortes de personal o la reinvención han marcado los 12 meses de pandemia para sectores clave de la economía gaditana como la hostelería y el comercio. Para los restauradores ha sido la primera vez en 43 años que se han lanzado a la calle para exigir ayudas a las administraciones ante la amenaza de cierre.
Desde Horeca aseguran que ha sido un año marcado por los altibajos en las ventas para los empresarios, ya que a la inversión necesaria para adaptar sus locales a las exigencias sanitarias han añadido restricciones cada vez más duras en los horarios de apertura. Piden a las administraciones ayudas directas para salvar los meses previos al verano antes de perder los negocios por imposibilidad de asumir las rentas de los locales.
Meses de incertidumbre para el sector marcado también por la valentía de algunos empresarios gaditanos como Eduardo Sánchez Vallejo. La declaración del Estado de Alarma por coronavirus coincidió con la apertura de su nuevo local, 'Antípoda'.
El empresario asegura que las condiciones de afrontar un nuevo negocio en tiempos de Covid le llevaron a mirar otras fórmulas en el servicio ante el reto de adaptar el local y su servicio para que fuera rentable.
La reinvención también ha sido clave para los hosteleros que han visto en el servicio a domicilio una salida ante las restricciones horarias. En el caso de Eduardo Sánchez Vallejo su búsqueda de soluciones le ha llevado incluso a crear su propia aplicación de reparto bajo el nombre de Gadivery.
Búsqueda de alternativas para comerciantes y detallistas
Hostelería y comercio van de la mano en Cádiz y ambos sectores han compartido las consecuencias de la crisis sanitarias de forma paralela. desde las asociaciones como Cádiz Centro Comercial Abierto, Extramuros y la que representa a los detallistas de los mercados de la capital, Asodemer, coinciden en que la falta de información y de protección fue una constante los primeros meses, además de las pérdidas en las ventas.
Los portavoces destacan el esfuerzo realizado por los pequeños empresarios para adaptar los negocios a las exigencias de las autoridades sanitarias, inversión para la que subrayan no han recibido ayuda. El Mercado gastronómico es un claro ejemplo de este proceso de cambio en el servicio con reserva previa.
Otro factor donde converge el comercio y la hostelería en su supervivivencia a la pandemia es en la ejecución de nuevas fórmulas de negocio donde las nuevas tecnologías han sido clave para la venta online y el reparto a domicilio.
Así, en esta línea de coincidencias, desde las asociaciones de comerciantes aseguran que tras todo el esfuerzo realizado durante estos meses de pandemia, ahora necesitan ayudas directas por parte de las administraciones.
Los representantes del sector comercial subrayan que ya han puesto en marcha fórmulas para la búsqueda de inversores como la oficina de Centro Comercial Abierto, No obstante, piden el apoyo de la ciudadanía en las compras en el pequeño comercio y que las autoridades sanitarias les incluyan como grupo de riesgo en la vacunación.