La Policía Nacional detiene a 8 vecinos de la provincia, entre ellos un menor, por la tenencia y distribución de pornografía infantil
Los agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos de Cádiz llaman la atención sobre los abusos y el maltrato que supone el consumo de estas imágenes, para niños y niñas víctimas de las mafias a nivel internacional
Consumir pornografía infantil es delito, no solo su distribución. Una reciente modificación de la ley así lo establece y de esta forma lo recuerdan los agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Comisaría Provincial de la Policía Nacional.
Es el mensaje que lanzan los especialistas de este grupo de trabajo, con sede en la capital gaditana y que en el transcurso de la última operación realizada ha detenido a ocho personas, una de ellas un menor de 17 años, por distribuir vídeos de alto contenido sexual con niños como protagonistas. Se trata de vecinos de distintas localidades de la provincia, entre ellas la capital gaditana, Jerez, Chiclana, El Gastor y Puerto Real.
La Policía Nacional insiste en que tras las imágenes hay maltratos y abusos a los niños que aparecen, de países fuera de la Unión Europea en su mayoría y que en muchas ocasiones han sido secuestrados con tal fin. A pesar de la experiencia de estos agentes, les sigue sobrecogiendo la crudeza de las imágenes con las que se encuentran.
Ha sido llamativa la detención en esta ocasión de un menor de 17 años por consumir y distribuir pornografía infantil. Se sale del perfil habitual de las personas que cometen este delito, que son mayores de edad y varones. En su mayoría sabían que estaban realizando una actividad delictiva.
Los agentes llegan hasta este tipo de delincuentes de distintas formas. A veces con los rastreos rutinarios que realizan utilizando herramientas de reconocimiento de imágenes pedófilas, otras a través de avisos de seguridad de otros países o con la ayuda de organizaciones internacionales que velan por la infancia. También se resuelven casos de este tipo tras denuncias ciudadanas.
Algunos de los detenidos en esta operación del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Comisaría de Cádiz, usaban software de intercambio de archivos y otros utilizaban redes sociales como Facebook o Instagram para compartirlos.
La Policía Nacional hace un llamamiento a las familias para el control de lo que usan y comparten los menores a su cargo en internet, alertando del riesgo que corren de ser engañados y chantajeados.
