El Plan de Actuación de la Inspección 2023-27 contribuirá al refuerzo de la autoridad docente y a la mejora de los resultados académicos

La Inspección Educativa, integrada por 285 docentes, es un agente fundamental para la calidad del sistema educativo y que como órgano cualificado aporta una visión técnica y especializada de las aulas.
La Inspección Educativa, integrada por 285 docentes, es un agente fundamental para la calidad del sistema educativo y que como órgano cualificado aporta una visión técnica y especializada de las aulas.
Redacción OC

La nueva norma, en la que ha participado este colectivo, está alineado con las prioridades de la Consejería, la atención al alumnado más vulnerable y la Formación Profesional.

La Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional ha publicado en el BOJA el Plan General de Actuación de la Inspección Educativa de Andalucía para el periodo 2023-2027 que define las líneas de trabajo y los criterios de actuación de este colectivo de acuerdo con las prioridades marcadas por la Consejería así como con las necesidades y nuevas demandas de los centros educativos andaluces. Así entre los objetivos generales de la norma destaca su colaboración en la mejora de la calidad y equidad de los procesos de enseñanza y aprendizaje y en el funcionamiento de los centros educativos, incidiendo en los procesos que desarrollan, a través la supervisión, asesoramiento y evaluación. Para ello se implementarán líneas estratégicas encaminadas a alcanzar el éxito educativo del alumnado sobre todo haciendo énfasis en las competencias en comunicación lingüística, matemáticas y en ciencia tecnología e ingeniería (STEAM). También se pondrá el foco en las medidas de promoción de la convivencia y bienestar emocional así como para la reducción de las tasas de absentismo, fracaso y abandono escolar. De esta manera, el servicio de inspección realizará un seguimiento y monitorización del alumnado en situación de riesgo de no garantizarse su derecho a la educación por absentismo escolar y se supervisarán los procedimientos de control de asistencia del estudiante de los centros sostenidos con fondos públicos. Igualmente, la nueva norma tiene como finalidad contribuir al refuerzo de la autoridad docente como principio básico de actuación de la inspección educativa, garantizándose a su vez, los derechos de cuantos participan en el proceso educativo y potenciar la función directiva y su liderazgo a través de la evaluación continua de sus competencias profesionales, realizándose una valoración final objetiva basada en datos y evidencias. Además, el Plan General pretende detectar e impulsar la divulgación de las buenas prácticas desarrolladas y acreditadas en los centros docentes, servicios, programas y actividades del sistema educativo, así como de las innovaciones educativas.

Otros de los objetivos recogidos en el documento son trasladar a la Administración Educativa información relevante sobre los recursos, procesos y resultados del sistema educativo con el fin de facilitar la toma de decisiones e impulsar el desarrollo profesional y la internacionalización de la inspección educativa, a través de itinerarios formativos y la participación en programas europeos. Respecto a la Formación Profesional el nuevo plan pretende contribuir a su desarrollo en Andalucía adecuándola al nuevo marco normativo, potenciando sus niveles de calidad y contribuyendo a la reducción del abandono escolar. De esta manera, se establecerán líneas de asesoramiento comunes para la implementación del desarrollo de la nueva norma de Formación Profesional; se mantendrán reuniones de asesoramiento con los centros que imparten estas enseñanzas con una periodicidad al menos de dos reuniones a lo largo del curso durante la vigencia del Plan y se supervisaran aspectos vinculados con la organización, condiciones de cualificación y formación del profesorado, entre otros. El plan incluye que el principio rector de la inspección educativa en el desarrollo de sus funciones y en su relación con los centros docentes es la simplificación administrativa, ayudando así a la reducción burocratización de los centros educativos. 

En definitiva, la Inspección Educativa, integrada por 285 docentes, es un agente fundamental para la calidad del sistema educativo y que como órgano cualificado aporta una visión técnica y especializada de las aulas. También trabajan de manera colaborativa con los centros y equipos directivos, introduciendo dinámicas que permiten su buen funcionamiento y la mejor prestación de sus servicios.