La Fundación Cajasol inaugura oficialmente la Navidad con la bendición de su Belén homenaje a San Francisco de Asís
El obispo de Cádiz, Rafael Zornoza, ha presidido el acto de bendición coincidiendo con la festividad de la Inmaculada Concepción
La tradición en España dice que el belén no debe ponerse hasta la fiesta de la Inmaculada, y que puede permanecer hasta la fiesta de la Candelaria, ya en el mes de febrero.
Y aunque las puertas del nacimiento se abrieron a principios del mes de diciembre, este día 8, festividad de la Inmaculada Concepción, la Fundación Cajasol ha bendecido su Belén.
Y lo ha hecho, un año más, el obispo de la Diócesis, Rafael Zornoza, que ha acudido hasta la antigua Casa Pemán para disfrutar de los tres belenes que ha montado el belenista gaditano Gonzalo Carrillo.
Uno, tradicional, hebreo, en donde la Virgen María va a coger al Niño Jesús que lo sostiene San José.
El segundo, una Sagrada Familia, tipo Napolitano, y el tercero, y más novedoso, un homenaje al "padre" del Belén, San Francisco de Así.
De hecho, este nacimiento es un belén dentro de un belén, ya que representa el momento, aquel 24 de diciembre de hace 800 años, cuando, durante la misa del Gallo, el santo italianon tuvo a bien poner en un pesebre la imagen de un niño Jesús. Buscó a una mula y a un buey, tan y como narran los Evangelio, y le pidió a una mujer y a un hombre que representasen a la Virgen María y a San José.
Desde entonces, y cada año, se representa el nacimiento de Jesús en miles de casas de miles de ciudades del mundo.