Conmemoración

Un estudio visibiliza el papel de los abuelos cuidadores y pide apoyos para que su rol no suponga una sobrecarga

Un abuelo coge de la mano a su nieto en una imagen de archivo.
Un abuelo coge de la mano a su nieto en una imagen de archivo.
Redacción OC

Casi la mitad de abuelos y abuelas (46,7%) cuida a sus nietos de forma habitual y el 28,6 % realiza esta labor diariamente.

Aldeas Infantiles SOS visibiliza en su informe 'Abuelos y abuelas, ¿qué haríamos sin ellos?', publicado con motivo del Día de los Abuelos, que se celebra este sábado 26 de julio, el papel de los abuelos y abuelas en la crianza de sus nietos y pide apoyos para que este rol no suponga una sobrecarga.

Según recuerda Aldeas Infantiles SOS, en España, el 85% de los abuelos y abuelas participan en el cuidado de sus nietos en algún momento y casi la mitad (46,7%) lo hace de forma habitual, mientras sus hijos e hijas trabajan.

El informe recoge testimonios como el de Francisco Muñoz, de 85 años, que ha sido presidente de la Asociación de Abuelos de España, y tiene 12 nietos y 5 bisnietos. Muñoz compara el papel de los abuelos con el "scramble" en la aviación.

"En los hangares de los aeropuertos militares, hay siempre dos aviones con los motores encendidos. Cuando el radar detecta una aeronave no identificada, si no se consigue contactar con ella mediante un aviso de emergencia, esos dos aviones antes de 8 minutos tienen que estar encima del intruso. Pueden estar 15 días sin salir. O, a lo mejor, en un día tienen que salir cinco veces", explica.

Muñoz apunta que "el contrato que une a un abuelo con su nieto es el máximo que hay: el cariño" y añade que cuando uno se jubila, "no se termina el mundo" porque sigue siendo "útil para ayudar a la familia".

También recuerda cómo sus nietos han aprendido con él a jugar a las chapas y cómo él juega con ellos a la videoconsola. En este sentido, comenta la importancia de estar al día. "Tienes que saber usar el Whatsapp. Si tú esperas que tu nieto te mande una postal, no hay comunicación. Tu nieto te puede mandar una 't' y una 'q' y tienes que saber que eso significa 'te quiero' y que tú tienes que contestar 'y +', que significa 'yo más'", comenta.

Por su parte, Antonella de Maio, de 66 años, se mudó a Madrid desde su Italia natal hace dos años para ayudar a su hijo separado con la crianza de sus dos nietas, de 6 y 2 años, y cuenta que tiene con ellas "un vínculo muy fuerte". "Ser abuela es maravilloso", asegura.

Si bien, tiene claro que, para evitar conflictos, es importante respetar la autoridad parental. "Hay que tener mucho cuidado para no interferir con el papel de los padres, por ejemplo, con la educación que deciden para sus hijas", señala.

"COMPENSAN LA CARENCIA EMOCIONAL"

Según apunta la psicóloga Mercedes Bermejo, los abuelos y abuelas "logran compensar la carencia emocional que puede suponer para los niños y niñas la presencia, a veces limitada, de sus referentes primarios". "Es una forma de estar con los nietos muy diferente a la de los padres y madres que se encuentran atrapados en la rutina del estrés laboral. Los abuelos transmiten valores desde un lugar más calmado, sólido y pausado. En su forma de educar aportan templanza, sensatez, calma", añade.

Si bien, advierte de que la relación que se establece con los abuelos y abuelas cuidadores, a veces, precisa de unos límites. "En ocasiones, cumplen con jornadas completas de cuidado de nietos y nietas, con todo el esfuerzo psicológico y físico que eso supone", avisa la psicóloga para subrayar que los abuelos y abuelas necesitan también cuidarse a sí mismos, tener sus espacios para descansar.

A esto se suma, según precisa, que cada vez se tienen los hijos en etapas tardías, lo que hace que los abuelos sean también más mayores. "A veces, viven una saturación de responsabilidades, cuando tienen que hacerse cargo de los nietos desde que salen del colegio o durante parte de las vacaciones, porque los padres están trabajando", enfatiza. Es lo que se denomina, según indica, el "síndrome del abuelo esclavo", cuando acaban atendiendo a los nietos más tiempo del que querrían porque sus hijos e hijas así se lo piden.

AMPLIAR LOS PERMISOS DE PATERNIDAD Y JORNADAS FLEXIBLES

En este contexto, Aldeas Infaltiles SOS considera "imprescindible" el desarrollo de "medidas de conciliación efectivas y reales" por parte de las empresas y la Administración. Entre otras propuestas, plantean la ampliación de los permisos de maternidad y paternidad, la posibilidad de jornadas laborales flexibles o reducidas, el impulso del teletrabajo regulado y voluntario, la implementación de horarios escolares más compatibles con la jornada laboral o la creación de centros de cuidado infantil accesibles.

"Estas políticas permitirían a los progenitores asumir plenamente su rol en la crianza, sin que asignemos a los abuelos una responsabilidad que no les corresponde".

Al mismo tiempo, la ONG considera fundamental visibilizar su esfuerzo y acompañarlos con medidas que aseguren su bienestar como: acceso a servicios de salud, espacios de descanso, oportunidades de participación activa y recursos para afrontar su rol de apoyo sin que ello suponga una sobrecarga.

LOS ABUELOS ACOGEDORES

Aldeas Infantiles SOS también pone de relieve la labor de los abuelos acogedores. De los 51.972 niños y niñas que crecen en España en el sistema de protección, 18.097 lo hacen bajo una medida de acogimiento familiar (51 %). De ellos, 10.706 (59,16 %) viven en la modalidad de acogimiento en familia extensa, es decir, con algún miembro de su familia biológica, en la mayoría de los casos, abuelos o abuelas.

"El amor de los abuelos es lo más valioso que necesitan estos niños y niñas que han sido separados de sus padres. Esta solución, en la que sus personas de referencia son de su propia familia, les permite preservar los vínculos familiares", señala la psicóloga y terapeuta familiar Beatriz Saguar, con 16 años de experiencia el Centro de Atención a la Infancia - CAI de la Comunidad de Madrid, encargada de la supervisión de acogimientos en familia extensa.

Saguar subraya la importancia de "apoyar a estos abuelos y abuelas acogedores y, antes de comenzar el acogimiento, mostrarles un buen mapa de lo que va a suponer, para que no les sorprenda".

Además, la ONG reclama servicios de orientación y asesoramiento personalizado, de mediación familiar y atención psicológica, así como recursos formativos para mejorar sus habilidades en la crianza positiva y la construcción de vínculos seguros, redes de apoyo emocional y un mayor reconocimiento a su labor en la protección de la infancia.