Cuatro detenidos, uno menor, al desmantelar una finca que almacenaba casi 600 garrafas para narcolanchas

Distribuían las petacas a las organizaciones de narcotráfico en furgonetas de alquiler.
La Guardia Civil de Cádiz ha detenido a cuatro personas, una de ellas un menor de edad, al desarticular una organización criminal que usaba una finca de Chiclana como guardería de droga y en la que se almacenaban casi 600 garrafas de gasolina para abastecer a narcolanchas.
En una nota, la Guardia Civil ha explicado que el combustible era distribuido posteriormente a organizaciones de narcotráfico a través de furgonetas de alquiler.
En concreto, han estimado que manipulaban más de 20.000 litros de combustible a la semana en el interior de la vivienda durante horas, sin ninguna medida de seguridad para los vecinos que habitaban las casas colindantes.
La actuación en organizar el dispositivo permitió la interceptación de 9.500 litros de combustible, 597 petacas de gasolina, un vehículo Toyota sustraído y numeroso material eléctrico empleado para las plantaciones de marihuana indoor.
A los cuatro detenidos, uno de ellos menor de edad, se les imputan los delitos de pertenencia a organización criminal y tráfico de drogas.
Las investigaciones comenzaron a principios durante el pasado mes de junio cuando los agentes del Equipo Roca de Chiclana de la Frontera tuvieron conocimiento de que el interior de una finca de la localidad, pudiera estar siendo utilizando como guardería y punto de distribución de petacas de gasolina a organizaciones del narcotráfico, albergando una gran cantidad de combustible en unas condiciones "ínfimas" de seguridad.
Los agentes realizaron durante ese tiempo numerosas gestiones y vigilancias discretas en las que pudieron comprobar que el modus operandi utilizado por la organización, que se repetía periódicamente. Así, unas furgonetas, siempre de alquiler, trasladaban garrafas llenas de gasolina desde la guardería hasta puntos aislados con acceso a través de los caños para embarcaciones de bajo calado, punto en el que realizaban el transbordo de estos envases a las embarcaciones petaqueras.
Del mismo modo, se tenía conocimiento de que la organización criminal se dedicaba a manipular el combustible con un surtidor portátil con los que llenaban una a una las garrafas en el interior del domicilio con el propósito de pasar desapercibidos, ya que esta actividad se prolongaba durante horas.
La Guardia Civil ha destacado que esta actividad se realizaba con unas cantidades de gasolina que se convertían en "un detonante explosivo", al tratarse de un producto altamente inflamable, el cual manejaban "con total descuido y desprecio a la vida de los vecinos que habitan en viviendas colindantes".
Fruto del trabajo de la Guardia Civil en la lucha contra el narcotráfico, los agentes organizaron el pasado 11 de agosto un dispositivo para llevar a cabo la entrada y registro del domicilio, incautando como resultado 380 garrafas de combustible, lo que supone un total de 9.500 litros de gasolina, y otras 217 garrafas aún vacías dispuestas para su uso, siendo un total de 597 petacas.
De igual modo, se ha procedido a la incautación de un vehículo Toyota robado desde el año 2022 en la provincia de Granada y que se encontraba oculto en el interior de la guardería. El automóvil presentaba modificaciones en su interior dispuestas para alijar, con el objetivo de introducir paquetes de droga desde la costa.
En el interior del domicilio se ha hallado un surtidor de gran capacidad con el que también se valían para realizar el llenado de cada una de las garrafas, así como teléfonos satelitales y equipo náutico especializado destinado al uso de narcolanchas.
También se han hallado los equipos específicos y útiles necesarios para la instalación de una plantación indoor de marihuana, listos para su uso, entre los que se encontraban filtros de carbono de gran rendimiento, extractores industriales, sistemas de aire acondicionado y productos de jardinería especializado para el aumento de la producción.
Finalmente, se detuvieron infraganti en el interior de la vivienda a cuatro presuntos integrantes de la organización criminal, uno de ellos menor de edad. Uno es vecino de Chiclana y el resto de La Línea de la Concepción, y la mayoría cuenta con numerosos antecedentes por narcotráfico.
Tras ser puestos a disposición judicial se ha decretado prisión para el propietario de la vivienda.