Debate

El artesano gaditano Jesús Moreno saluda el cambio de hora, aunque señala trastornos en nuestro reloj biológico

El horario de invierno entra durante la madrugada del sábado 25 al domingo 26 de octubre de 2025.
El horario de invierno entra durante la madrugada del sábado 25 al domingo 26 de octubre de 2025.
Marta Tocón

El maestro relojero asegura que aumenta la demanda de trabajo tras la activación de esta medida regulada por la Unión Europea, sobre la que el Gobierno de España ha insistido en la necesidad de poner fin de forma definitiva, con el horizonte puesto en 2026. 

Dos veces al año los españoles cambiamos las agujas de nuestros relojes para adaptar el horario a invierno o a verano. 

Originalmente, el cambio de hora fue adoptado para reducir el consumo de electricidad, aprovechando más horas de luz solar. En la actualidad, según los informes actuales, dicho ahorro son marginales, con lo que no hay certeza de que los beneficios se obtengan en todos los Estados miembros de la Unión Europea. 

Ante el cambio de horario a invierno que se avecina durante la madrugada de este sábado 25 de octubre al domingo 26, cuando a las 03:00 pasarán a ser las 02:00, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez ha anunciado la intención del Ejecutivo de reabrir el debate a nivel europeo, señalando que esta medida supone ya un “impacto negativo” en la salud y en la vida de los ciudadanos. 

Una propuesta que ha sido compartida por expertos y algunas entidades como la Sociedad Española del Sueño, entre otras, y por el maestro relojero gaditano Jesús Moreno, artesano del tiempo con más de 25 años de trayectoria profesional en Cádiz, galardonado con el Premio a la Calidad en la Promoción y Comercialización en la comunidad andaluza. 

Para Jesús Moreno, este cambio de hora supone en su trabajo una mayor demanda de encargos en el taller ubicado en la calle Santo Domingo, en el barrio de Santa María. Aunque, por otro lado, considera que la implantación de esta medida provoca una serie de trastornos en el día a día de los ciudadanos, como falta de sueño, irritabilidad, falta de concentración o cambios en el estado de ánimo. 

Entiende el relojero, además, que se debería de mirar la efectividad del cambio de hora en cuanto a ahorro energético, ya que los hábitos de consumo han cambiado desde los años 70. 

Aún no hay día oficial para el fin del cambio de hora. Hay que esperar a la publicación en el BOE de un calendario concreto que recoja la modificación del horario para los próximos cinco años. En base a ese cuadrante, el último cambio de hora en nuestro país será el 25 de octubre de 2026. 

Jesús Moreno, gaditano apasionado de su trabajo, asegura que la profesión de relojero es un oficio en peligro de desaparecer y se muestra incierto por el futuro del sector en la provincia y a nivel nacional. Con el objetivo de difundir y promocionar su labor, lanzó durante la pandemia de la COVID el proyecto virtual Relotecnic (https://relotecnic.com/), un servicio de reparación y restauración de relojes en Cádiz capital. 

De cara a los próximos meses, el relojero ha anunciado una cesión de local por parte de PROCASA, con la intención de mejora y amplitud del espacio de trabajo, que estará ubicado en el barrio de Puntales.