La policía nacional insiste en la denuncia como instrumento clave en la lucha contra los asesinatos de mujeres

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Almudena de la Montaña

Los agentes atienden a las víctimas de violencia de género desde el primer momento en el que interponen la denuncia, bajo un código ético, empatía y cercanía

Desde que una mujer víctima de violencia de género atraviesa la puerta de una jefatura de Policía Nacional, en cualquier punto del país, los agentes trabajan bajo unos criterios estipulados, pero sobre todo poniéndose en la piel de la denunciante.
Desde esta primera toma de contacto hasta el final del proceso se ofrece toda la información sobre cómo, cuándo y dónde acudir, y los servicios que tienen a su disposición.
A partir de ese momento, ya sea por denuncia o de oficio por parte de las fuerzas de seguridad, se inicia un protocolo (puesto en marcha en 2013) denominado VioGén, en el que la víctima realizará una declaración que llevará a los agentes a situar en un nivel de cinco el riesgo.
En Cádiz, en la actualidad son 2766 los casos activos en el sistema de Seguimiento Integral, muchos de ellos extremos que conllevarán a la protección inmediata y vigilancia 24 horas. Mecanismos que para la Policía son esenciales para evitar más asesinatos.
Tras la denuncia y el seguimiento por parte de la UFAM, la unidad especializada en atención a la familia y la mujer del cuerpo nacional, se sucederán las acciones de investigación y judiciales que determinarán las consecuencias para el agresor.
De las 52 asesinadas en España en 2019, 40 no habían interpuesto denuncia. La Policía Nacional insiste que ese primer paso no sea el obstáculo, están para atender y entender.