El tráfico portuario en la bahía de cádiz ha aumentado en más de un 15% durante el primer semestre del año

Un crecimiento respecto al mismo período del pasado 2019 que se ve reflejado en los 2,1 millones de toneladas de mercancías movidas en este medio año
Un dato especialmente destacable considerando el período de dificultades que se ha sufrido durante este tiempo debido a la crisis del coronavirus y la tendencia general de los puertos españoles, Así, mientras que en la Bahía gaditana se ha logrado aumentar la actividad, el COVID-19 sí se ha dejado sentir más a niveles estatales provocando una bajada media del sistema del 10 por ciento.
Los factores que han propiciado estos buenos resultados semestrales en Cádiz se encuentran principalmente en el aumento de graneles líquidos, que crecen un 36%, y el aumento en el tráfico de contenedores. Por contra, destaca negativamente el tráfico roro que anota un descenso del 8% y el tráfico con Canarias.
Con todo, y dadas las circunstancias, esta tendencia general al alza en los muelles gaditanos ofrece una visión moderadamente optimista. Más aún en el momento clave por el que pasa el puerto de Cádiz en el que se proyecta a corto plazo el mayor cambio experimentado en años. Y es que en unos meses, con la previsible entrada en servicio de la, nueva terminal de contenedores, se producirá una remodelación sustancial de espacios y actividades.
Cambios que implicarán no solo el traslado de la gestión de los contenedores a las nuevas instalaciones sino la mayor integración del muelle con la ciudad, como recogen los planes portuarios. Precisamente, días atrás, coincidiendo con la apertura del tramo de carril bici y de zonas de tránsito para ciudadanos por suelo portuario, la presidenta de la APBC, Teófila Martínez, se refería a la modificación de espacios que ya se empieza a percibir. Todo ello supeditado a la entrada en servicio de la nueva terminal que, tras el retraso provocado por el parón del coronavirus, confía en que se pueda producir a comienzos del año próximo.
Este proyecto de la nueva terminal de contenedores supone el mayor esfuerzo inversor en obras y servicios de mejora en competitividad y eficiencia que la Autoridad Portuaria contempla para este ejercicio, en el que prevé invertir un montante global de 20,8 millones de euros.