Los vecinos del patio de la Alegría piden la eliminación de las barreras arquitectónicas

Las barreras arquitectónicas han convertido sus casas en una cárcel
Los vecinos del Patio de la Alegría piden mejoras en los accesos
Mayte Huguet

Denuncian que hay más de 30 vecinos que llevan más de una década sin bajar a la calle

La vida pasa a diario desde sus ventanas.

Llueva, haga sol, sople el viento de Levante o llegue de nuevo Filomena.

Un confinamiento, pero de décadas.

Así viven más de 30 vecinos del grupo de viviendas sociales de la plaza de los Cantes de Cádiz.

Unas fincas construidas por la Junta de Andalucía hace más de 30 años con escaleras infinitas y sótanos como entradas de acceso a sus casas.

Un laberinto arquitectónico del que sus vecinos quieren salir.

Solo piden dos rampas de acceso a sus viviendas, además de un ascensor en la única finca que aún no la tiene.

Y es que María, Antonia o Isabel llevan años sin poder sentir el aire fresco de Cádiz en sus caras.

La entidad vecinal lleva más de 20 años reclamando a la Junta de Andalucía mejoras en los accesos a sus viviendas.

Accesos que, sus vecinos, cuentan, que, en los planos originales, estaban hacia la calle, pero que alguien decidió hacerlas por el patio.

Más de 20 años pidiendo 4 rampas, que incluso han estado presupuestadas, pero de las que solo se construyeron dos.

 

Ahora el PSOE de Cádiz quiere apoyar a estos vecinos en sus reclamaciones y llevarán al Parlamento Andaluz la actuación urgente en este grupo de viviendas.

Vivir dignamente.

Eso es lo único que piden los vecinos de la plaza los cantes de Cádiz.

Donde las barreras arquitectónicas no sean ninguna barrera para poder sentir el aire de su barrio.