Coordinación en seguridad
El Plan de autoprotección y protocolos específicos ante situaciones de emergencia son algunos de las medidas que intentan garantizar el mejor desarrollo de la Semana Santa.
Las fuerzas y cuerpos de seguridad han desplegado un año más un amplio dispositivo con el objetivo de garantizar la normalidad durante los desfiles procesionales. Aunque la lluvia ha afectado a gran parte del desarrollo de la Semana Santa, la coordinación se ha mantenido tal y como se había planteado desde el inicio; hace meses que se comenzó ya a trabajar en los protocolos de actuación y disposición de efectivos.
El denominado Plan de Autoprotección tiene como objetivo controlar todo lo que rodea a la celebración de la Semana Santa y calibrar todos posibles peligros y amenazas que puedan alterar el orden normal de una procesión y de la ciudad. Desde Protección Civil se llama a la calma en cualquier situación de emergencia que pueda acontecer; entre los consejos: apartarse si llegara el caso de avalancha.
Las personas mayores, con problemas de movilidad o menores son los grupos de población a los que se deben mantener una mayor atención, principalmente en aglomeraciones por desorientaciones o pérdidas. Desde Protección Civil aconsejan las pulseras nominativas, pero alertan de algunos detalles a tener en cuenta.
A las cofradías y hermandades también se les ha dado a conocer este Plan de Autoprotección realizado por técnicos de Protección Civil, un listado de amenazas que contempla desde desprendimientos de fachadas, electrocución por cables o incluso aviso por ataques terroristas. Situaciones que pueden parecer alarmantes, pero cuya previsión es fundamental para la correcta aplicación de los protocolos que reduzcan los peligros.
