Expectativas

Navantia Cádiz, a punto de cerrar un año de récord

Vista exterior de la entrada de los astilleros de Navantia en Cádiz.
Vista exterior de la entrada de los astilleros de Navantia en Cádiz.
Mirian Peralta

La unidad de reparaciones cuenta además con unas perspectivas que presumen un 2025 en la misma senda de crecimiento.

La reparación de cruceros se mantienen como punta de lanza del astillero de Navantia en la capital. Una especialización que les ha llevado a consolidar una cartera de clientes con las principales compañías del sector que renuevan su confianza con la empresa naval pública, tras comprobar los resultados de los trabajos que afrontan. 

Casos como el de la Royal Caribbean, una de las empresas más potentes del mundo, que tiene hasta este fin de semana en el dique 4 de Navantia Cádiz al tercero de sus buques para una puesta a punto. Tras el Oasis of the Seas y el Voyager of the Seas, está el Adventure of the seas en el astillero para su varada técnica. 

Estas reparaciones de la Royal cuentan con un exigente calendario de plazos que supone una prueba de fuego de las capacidades de la plantilla del astillero gaditano y de las empresas auxiliares. A pesar de los ajustado de las fechas de finalización de los trabajos, Navantia está cumpliendo, aún con los condicionantes del temporal, y los paros laborales por el retraso del convenio. Coincide también en el astillero gaditano el crucero WindSurf, de la compañía Wind Starque tendrá una estancia en el dique 1 de casi un mes- 

La ocupación de los diques del astillero de la capital han obligado incluso a derivar carga de trabajo a la planta de Puerto Real, por falta de espacio. En Matagorda se encuentra el Marella Explorer donde permanecerá hasta el puente de diciembre. Releva en este dique a otro crucero de la misma compañía el Discovery 2, que sufrió un retraso en la finalización de sus trabajos a consecuencia del paso de la DANA por Cádiz.

Con todo, el año 2024 puede acabar con unos 18 cruceros reparados en la bahía de Cádiz, lo que supone mejorar las buenas cifras de negocio alcanzadas ya el pasado ejercicio. Un sector al que se suma alrededor de medio centenar de barcos civiles que también han pasado por los diques del astillero de la capital, que cierran así un año de record de carga de trabajo. 

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