La plataforma de conexión ferroviaria de la Cabezuela, a un paso de completarse
Esta infraestructura estará operativa el próximo año y propiciará el despegue logístico y empresarial que se quiere impulsar en la zona portuaria de Puerto Real.
Las obras del enlace ferroviario del Bajo de la Cabezuela cerrarán el verano con un avance fundamental. Después de varias semanas de intensa actividad el proyecto ha logrado completar con éxito uno de sus más importantes hitos: el montaje de la plataforma central que discurre sobre la carretera CA-36 que conecta Puerto Real y Cádiz por el Puente Carranza.
Una operación muy comprometida que se ha realizado en distintas fases y en turnos de noche para causar las menores molestias posibles. Y es que el complejo desarrollo de colocación de los nuevos tableros requerían ineludiblemente el corte de tráfico por esta vía mientras se levaba a cabo su ejecución.
De esta forma, en las últimas semanas, se ha procedido, en varias etapas, a la colocación de los dos tramos de plataforma que sobrepasan la carretera. Maniobras que han requerido el empleo de dos enormes grúas para la instalación de las estructuras y levantar dos de los tres pilotes pendientes sobre los que descansan los nuevos tableros.
Superada esta fase, y mientras se continúa avanzando a buen ritmo en el montaje de la base y todos los elementos de la parte superior de la plataforma del viaducto, solo queda un último tramo de algo más de 60 metros para completar todo el ramal. O lo que es lo mismo: con el montaje de los dos tableros finales de 33 metros cada uno y el último pilote sobre los que se asentarán se logrará conectar definitivamente con el extremo situado el interior del astillero.
Una operación que, sin embargo, reviste mayor complejidad a las anteriores debido a los cables de alta tensión que discurren sobre el trazado del viaducto. Según fuentes consultadas por Onda Cádiz, este tendido eléctrico que da servicio a la capital deberá ser soterrado en esta zona por dos motivos: primero para permitir la instalación de los últimos tableros; y posteriormente para no entorpecer el tránsito de los trenes que pasarán por encima de la plataforma.
Con todo, cabe destacar la buena marcha de las obras y su nivel de ejecución que hacen prever su conclusión y entrada en servicio el año próximo. Una cuestión a la la presidenta de la APBC se refería semanas atrás.
Tras décadas reclamando esta infraestructura, el empresariado gaditano y la comunidad portuaria confían en que su entrada en servicio suponga un impulso fundamental a las potencialidades logísticas e intermodales de la Bahía de Cádiz.