Investigadores de la UCA detectan que la estación del año determina los nutrientes que aporta la lechuga de mar
Las algas recolectadas en estero y conocidas como lechuga de mar son más ricas en compuestos grasos, como el omega 3, si se cosechan en verano, y en proteínas, hierro y zinc si la recogida se realiza en otoño
Un equipo de investigación de la Universidad de Cádiz (UCA) ha constatado que las algas recolectadas en estero y conocidas como lechuga de mar son más ricas en compuestos grasos, como el omega 3, si se cosechan en verano, y en proteínas, hierro y zinc si la recogida se realiza en otoño, toda vez que en invierno y primavera su composición resulta más equilibrada. Con esta información, los gestores de estas zonas podrían decidir el momento óptimo para la cosecha según los nutrientes específicos que desearan obtener.
El trabajo de investigación realizado por la UCA y financiado a través del proyecto RNM1235 (Ealga) de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación de la Junta de Andalucía confirma que estas algas de estero son más ricas en compuestos grasos como el omega 3, beneficioso para la salud cardiovascular, en verano, mientras que en otoño contienen más compuestos minerales como hierro y zinc, esenciales para el buen funcionamiento del sistema inmunitario, la cicatrización de heridas o el fortalecimiento de tejidos. La investigación también determina que la composición nutricional de la lechuga de mar es más equilibrada en los meses de invierno y de la primavera, según ha detallado la Junta en nota de prensa.
La lechuga de mar es un tipo de alga verde que se encuentra comúnmente en zonas costeras. Se caracteriza por sus hojas delgadas y onduladas y se utiliza, tanto en la alimentación humana como en la acuicultura. El objetivo de los investigadores era determinar su valor nutricional para potenciar este recurso alimentario y su posible explotación y cultivo en los esteros de la zona.