La CEC se suma al rechazo a las críticas de algunos políticos contra las empresas

Imagen de la fachada de la sede central de la Confederación de Empresarios de Cádiz
Imagen de la fachada de la sede central de la Confederación de Empresarios de Cádiz
Redacción OC

La patronal sale al paso de las denuncias y ataques que algunos políticos y miembros del gobierno han dirigido contra la clase empresarial y concretamente hacia una compañía española de referencia

La Confederación de Empresas de la provincia de Cádiz (CEC) se suma al rechazo de las organizaciones empresariales a las manifestaciones de representantes políticos, algunos miembros del Gobierno, en las que cuestionan el papel del empresariado a través de una agresión directa a uno de los empresarios con mayor trayectoria de España.

En línea con la CEOE, la CEC recuerda que la Constitución Española ampara la libertad de empresa y que los ataques de estos políticos y miembros del Gobierno se dirige a quienes hacen posible la creación de empleo y riqueza.

En un comunicado, la patronal gaditana manifiesta que "la iniciativa privada, las empresas, no merecen ser objeto continuo de tópicos y falsos estereotipos dirigidos a cualquier forma de desempeño empresarial: autónomos, comerciantes, agricultores, pequeñas y medianas empresas y quienes, con esfuerzo, talento y constancia, llegan a hacer crecer sus negocios hasta convertirnos en grandes compañías que dan empleo a miles de trabajadores".

La CEC recuerda además que la obligación de nuestros gobernantes es, entre otras, la protección del ejercicio empresarial que nuestra Constitución recoge en su artículo 38, en el marco de la economía de mercado. Hacer lo contrario es incompatible con el desempeño de un cargo público y el ejercicio de un poder del Estado.

Los actuales son momentos para buscar soluciones a los graves problemas que afronta España y que afectan también a las empresas españolas. Respuestas, en base a reformas, y no ataques, deben ser las aportaciones de los representantes políticos, manteniendo el respeto a la convivencia, la estabilidad y la confianza.

La CEC afirma que las empresas deben estar en el centro de las soluciones, porque son el motor de la economía y los verdaderos generadores de riqueza y empleo en nuestra sociedad.